Una de cada tres personas vive en un país con escasez de agua entre moderada y alta, y es posible que para 2030 la escasez afecte a casi la mitad de la población mundial. El cambio climático y las necesidades de la población, requieren un trabajo conjunto para proteger y administrar este recurso frágil y limitado.
Es necesario llamar la atención sobre la importancia de los recursos de agua dulce del planeta y crear conciencia sobre la necesidad de un uso sostenible de los mismos. Sigue leyendo