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Todos estaremos de acuerdo en que los hombres y las mujeres no son lo mismo. Unos dirán que ellos son mejores y ellas dirán que no. Lo cierto es que todas las comparaciones son odiosas y susceptibles de crear confusión y enfados, por lo que lo más sensato es dejarse de apasionamientos y reflexionar con la seriedad que este asunto merece.
Repasando los estudios que se han realizado al respecto nos quedamos con el publicado por el British Journal or Psycgology dirigidos por los profesores de psicología Paul Irwing, de la Universidad de Manchester y Richard Lynn, de la de Ulster, en 2003, se habla de la relación directa entre el nivel de prosperidad de 60 países y el coeficiente intelectual (CI) medio de su población, llegando a la conclusión tras analizar los resultados de unos 20.000 exámenes de razonamiento sostenido entre estudiantes universitarios que la cantidad de hombres con CI de 125 es el doble que el de las mujeres.
¿Qué ocurre cuando el coeficiente intelectual es mucho mayor y toca los 155 puntos?: pues que la diferencia aumenta y es de 5,5 hombres por cada mujer. Este dato apunta el porqué según Irwing hay un gran número de hombres “que se distinguen en varios campos que requieren de un alto coeficiente intelectual, como los campeones de ajedrez, los premios Noble y asi…”
Pero que no se enfaden las mujeres. Lynn señala que sus estudios revelan que las mujeres muestran una mayor inteligencia hasta los 16 años, entre esa edad y los 21 se emparejan y después los hombres las superan, “los hombres tienen un cerebro un diez por ciento más grande de tamaño…necesariamente deben ser más inteligentes que las mujeres”, subraya Lynn, quien, por otra parte si que reconoce que en condiciones de paridad intelectual, las mujeres consiguen resultados “netamente superiores”.
Pero que las mujeres no se echen al monte y empiezen a despedazar a los psicólogos mencionados. Hablamos de 2003 pero desde entonces las mujeres han ido ganando a los hombres en los test de inteligencia. Calma¡¡¡ Si bien es verdad que los CI de las mujeres había permanecido hasta cinco puntos por detrás de los hombres y que esto venía a demostrar unas importantes diferencias genéticas, los datos son concluyentes. Las mujeres se han ido acercando con fuerza a las puntuaciones de los hombres y en 2012 batieron, por primera vez, a los hombres. La constatación de este hecho parte de James Flynn, toda una autoridad en las pruebas de inteligencia, quien publicó un exitoso libro en el que se dio a conocer por el ‘efecto Flynn’ por el que defendía que el CI de la población sube de forma continua y sostenida, año tras año, en todas partes del mundo.
En una entrevista al dominical británico The Sunday Times, el profesor ha asegurado que este logro de las mujeres “es consecuencia de la modernidad”, y asegura que su CI seguirá creciendo a mayor ritmo que el de los hombres.
En opinión de Flynn el auge del CI se está dando por igual en hombres y en mujeres, y la tendencia es que ambos sigan creciendo, pero “la mejora es más marcada en las mujeres pues tuvieron más desventajas en el pasado”. Hay diversas teorías para explicar por qué las mujeres han logrado superar a los hombres en los test de inteligencia. Algunos investigadores creen que la sociedad exige un esfuerzo mayor a las mujeres, que deben cumplir múltiples tareas, tanto en el entorno familiar como en el laboral, lo que las haría más inteligentes. Otra teoría es que las mujeres siempre han sido ligeramente más inteligentes, pero hasta ahora no habían mostrado todo su potencial debido a la preeminencia social del hombre.En cualquier caso, según Flynn, el CI de hombres y mujeres seguirá creciendo, pues el mundo es cada vez más complejo y “vivir en él requiere un pensamiento más abstracto”. Según el profesor, que ha publicado numerosos libros al respecto, el CI ha crecido de media en 30 puntos en los países en los que se ha estado midiendo desde hace un siglo. Una cantidad muy significativa que sirve como pilar de su teoría: la inteligencia no es genética y puede ser perfeccionada.
¿Qué podemos concluir? Pues que las mujeres ganan terreno y que en la actualidad ofrece una mayor preparación en base a su superioridad intelectual pero que los centros de decisión, en una gran mayoría, siguen estando en manos de los hombres. ¿Será esto un choque entre las más inteligentes contra los más fuertes? Cualquiera sabe aunque esperemos que no. El tiempo, testigo mudo, despejará todas las incógnitas.
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