MIEDO A ENVEJECER

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Gerascofobia: esa palabra casi impronunciable es el persistente, anormal e injustificado miedo a envejecer.  Los especialistas apuntan a que es a partir de los 60 años  cuando surge la  angustia ante la inminente llegada de esta etapa de la vida próxima a la muerte. En este hecho  influyen varios factores, como que  la persona padezca de otras fobias, temores o ansiedades; que sienta una falta de realización o de no haber alcanzado algunas metas u objetivos marcados; las circunstancias socioeconómicas…

La gerascofobia, como toda fobia, se asocia a cuadros psiquiátricos complejos, a personas con rasgos de personalidad ansiosos  o narcisistas.  Por ello, suele ir acompañada de procesos de ansiedad, miedo y continuos pensamientos negativos que llevan al individuo a sentir temor cuando piensan en el futuro.

En realidad todos somos conscientes de que la vida es un proceso que inevitablemente nos lleva al mismo destino: la muerte.  Nacemos, crecemos, adquirimos experiencia y conocimientos, mientras seguimos cumpliendo años y nuestro cuerpo va cambiado. El problema muchas veces radica en que los valores actuales nos llevan a identificarnos con nuestra imagen, con lo que se ve, y nos olvidamos de cultivarnos por dentro, ignoramos lo que no puede ser visto y no reconocemos la huella interna que deja la experiencia en el transcurso de nuestra dilatada vida. Y sí, es así, somos como los coches, que cambian, se estropean, envejecen, pero  el conductor  se hace más sabio, tiene más práctica, habilidades y conocimientos, al igual que las personas que crecemos y superamos  retos, dificultades, vivimos  alegrías y tristezas,  amores y desamores…

Aleah

En la sociedad actual, este problema de la gerascofobia lo padecen en mayor porcentaje las mujeres frente a los hombres. Y es que eso es lo que nos venden: mujeres que siempre tienen que lucir impecables. Por desgracia vivimos en una sociedad en la que las mujeres son vistas como cuerpos que conservan su dignidad únicamente si se mantienen guapas y jóvenes. Si esta sociedad valorara la vejez  y  considerara a la mujer como un ser pensante de pleno derecho, muchas no se verían obligadas a aparentar, a arriesgar su salud con operaciones de estética  ni a invertir tanto tiempo y dinero en aparentar una edad distinta de la suya. Y aún con todo eso es imposible detener el paso implacable del tiempo con tinte para el pelo, cremas, maquillaje, botox, cirugías estéticas… A los hombres, aunque no tienen esa vulnerabilidad ante las imposiciones externas, también les empieza a suceder y ya forman parte del mercado de la eterna juventud.

Sin embargo, existe el dicho de que hay personas que con el tiempo les pasa como a los buenos vinos, que mejoran a medida que envejecen. A medida que vas cumpliendo años te vuelves más sabio, adquieres experiencia y habilidades para manejar todos los problemas que se te cruzan en el camino y resolver situaciones de forma serena y meditada; te vuelves más interesante para los demás ya que tu sabiduría y experiencia pueden ser útiles para otras personas a las que puedes ayudar con un valioso consejo. A estas alturas sabes quién eres, estás más seguro(es importante conocerse a sí mismo en profundidad si quieres desarrollar el sentido de autenticidad) y te sientes más cómodo contigo mismo, te vuelves más maduro y comienzas a respetar tus decisiones.

Y es que envejecer significa que estás vivo y que has vivido mucho. ¿Por qué tanto temor al paso del tiempo si solo es otro invento más del Homo Sapiens?

carmen-blue11-e1401998995764Carmen Blue

 

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