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La segunda Aldea Infantil SOS que se creó en España fue la de Galicia, en Redondela, un pueblo de la provincia de Pontevedra. El 7 de diciembre de 1971 el Ayuntamiento de Redondela cedió los terrenos en la parroquia de Ventosela, donde se alzaría la construcción y el 16 de noviembre de 1975, los primeros ocho niños entraron a vivir a la primera casa.

Este hecho tiene nombre de mujer, de esas a las que en Que chic llamamos “mujer 5 estrellas”.

Rita Regojo, fue una mujer luchadora y preocupada por el sufrimiento de los más desfavorecidos y de los más inocentes, los niños.

Además de gestionar durante parte de su vida una compañía de confección de ropa de trabajo, dedicó mucho tiempo a Aldeas Infantiles, una ONG nacida en Alemania para ayudar a los niños huérfanos después de II Guerra Mundial.

Aldeas Infantiles SOS nació en 1949, acabada la II Guerra Mundial, para ayudar a la infancia abandonada. Fue el austríaco Hermann Gmeiner quien fundó la primera en Imst, Austria. Rita Regojo estaba en Lisboa, después de sufrir un aborto, cuando se enteró de su existencia a través de la revista «Telva», que en su número 133 dedicaba un reportaje a la labor de Aldeas Infantiles en el mundo y a la llegada de la organización a España de la mano de la catalana Montserrat Andreu, nieta del creador de las famosas pastillas para la tos. Pese a tener cinco hijos pequeños y un trabajo como empresaria, Rita Regojo no dudó en contactar con Montserrat Andreu. Gracias a ella conoció al fundador de SOS Kinderdorf Internacional, Herman Gmeiner. Fue en 1972, en la inauguración del primer centro de Aldeas Infantiles de España, en San Feliu de Codines (Barcelona). Gmeiner le prometió enviarle el dinero para construir dos casas, lo que unido a los fondos que tenían sirvió para levantar tres. La primera piedra fue colocada en 1973 en terrenos de Ventosela cedidos por el Ayuntamiento de Redondela. Gmeiner fue a la inauguración de la aldea y comentó que era la que tenía el paisaje más bonito del mundo.

Desde su fundación en Galicia hasta 2002, presidió la entidad solidaria en dicha Comunidad Autónoma. La organización mundial de Aldeas Infantiles le concedió su medalla de oro en 1989. La Xunta de Galicia le concedió en 1997 la Medalla Castelao y el Ministerio de Asuntos Exteriores, la encomienda de la Orden de Isabel la Católica en 2000. Poco antes, en 1999, el Ayuntamiento de Vigo la hacía viguesa distinguida en los actos de la fiesta de la Reconquista que se celebra en la ciudad olívica. Pero el galardón del que más orgullosa se encontraba Rita era el título de hija predilecta de Redondela, el reconocimiento de sus vecinos, de su gente.

Además, en mayo del 2012 se le hace un homenaje póstumo, celebrado en los jardines del centro de acogida de Ventosela (Redondela), que consistió en el descubrimiento de un busto de bronce de la emprendedora y con el que quedará perpetuado su recuerdo. El acto coincide con el cuarenta aniversario del trabajo de Aldeas Infantiles en Galicia. 

Rita Regojo fue una mujer generosa y como sucede con casi todas las mujeres diez, tuvo un modelo de comportamiento, su madre, Rita Otero, que llevaba cestas de comida a los presos de la cárcel de Redondela y era conocida como «la madre de los pobres».

La fundadora de Aldeas Infantiles de Galicia fue la mayor de ocho hermanos y también una ejemplar madre de seis hijos. Algunos acontecimientos familiares la marcaron profundamente. El primero de ellos, haber perdido a su madre, víctima de un cáncer, a los 54 años teniendo ella solo 27. En 1961 dio a luz a un niño que murió al nacer, y en 1969 sufrió un aborto que la dejó destrozada, poco antes de emprender su labor en Aldeas Infantiles. La vida la convirtió en una mujer dura pero sensible e inteligente. Así lo demostró durante su labor al frente de Aldeas infantiles. Ejemplo de ello es como a falta de subvenciones oficiales, Rita Regojo recurría para recaudar dinero a su amistad con grandes empresarios con apellidos como Massó, Alfageme, Bárcena y Santodomingo que le abrían muchas puertas. También organizaba distintos eventos: desfiles de moda femenina en el Hotel Bahía o en el Náutico de Vigo; lotería de Navidad; postales navideñas firmadas por artistas gallegos como Laxeiro; los estrenos benéficos de «Love story» (1971) y «Cabaret» (1972), ambos en el mítico cine Fraga de Vigo; las visitas desinteresadas de personajes famosos como Pitita Ridruejo y Sofía de Habsburgo o la del cantante José Luis Perales, en 1987, que invitó al escenario del Palacio de los Deportes de As Travesas a los niños de Ventosela para entonar con él «Que canten los niños», tema que compuso a beneficio de Aldeas Infantiles.

Rita Regojo extendió su labor a toda Galicia y siguió trabajando al frente de la entidad hasta cumplir 73 años. En su última etapa pudo ver cómo Aldeas Infantiles abría centros de día en Vigo y en Ponteareas y alcanzaba los 12.000 socios.

Permaneció activa hasta su fallecimiento, el 3 de julio de 2011, a los 82 años, por un repentino ataque al corazón que sorprendió a todos los que la conocían, ya que no estaba enferma.

Hoy nuestra «mujer 5 estrellas» es noticia debido a la publicación de un libro en el que se cuenta su historia: “Rita Regojo: la alegría de regalar vida”, escrito por la periodista Patricia Álvarez y que fue presentado el pasado mes de diciembre en el Multiusos de A Xunqueira (Redondela) ante la presencia de numerosos familiares y amigos, así como personalidades del mundo empresarial, de la cultura, la política y la actual presidenta de la asociación en Galicia, Rosa Freire.

Carmen Blue

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