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El orgasmo es el momento culminante del placer sexual. Es una de las mejores experiencias que puede sentir el ser humano, debido al gran placer que genera. Forma parte de la vida sexual de casi todas las personas, ya que algunas no consiguen alcanzarlo o desconocen que lo están experimentando, pero ese es otro tema. En estas líneas os contaré algunas curiosidades del orgasmo que seguro que os sorprenderán, además de señalar los beneficios que produce tanto a nivel físico como emocional.
Según un estudio elaborado en la Universidad Emory, el 72% de las mujeres han fingido un orgasmo y han sido descubiertas por el 55% de sus partenaires. Los motivos por los que se finge un orgasmo varían desde el miedo a defraudar, hasta la búsqueda de excitación de la pareja.
Debemos tener en cuenta que para conseguir un orgasmo no es suficiente con la estimulación de las zonas erógenas y la penetración, nosotras debemos poner de nuestra parte, flexionando los músculos de la base de la zona pélvica, lo que provocará espasmos orgásmicos.
Se puede “aprender” a tener orgasmos si combinamos caricias, penetración y contracción muscular, además de la confianza que tengamos en nosotros mismos y en la persona con la que mantenemos la relación sexual. Los ejercicios de Kegel, de los que ya hemos hablado en anteriores entradas, pueden ser muy útiles. Hay mujeres que tienen orgasmos mientras realizan deporte como el yoga, levantamiento de pesas o ejercicios abdominales.
La Universidad de Indiana indicó que el 51% de las mujeres tuvo un orgasmo realizando deporte. Y es que hay muchas formas de llegar al orgasmo sin que necesariamente sea mientras mantenemos relaciones sexuales. Además, con la madurez sexual, el orgasmo se alcanza de manera más fácil y rápida.
Existen diversas investigaciones que certifican que cada uno de los orgasmos que experimentamos son diferentes en intensidad y en calidad. Las mujeres, por ejemplo, obtienen más orgasmos cuando se masturban, con el sexo oral y con el sexo vaginal, por ese orden.
Por otra parte, el Journal of Sexual Medicine asegura que la duración óptima del coito está entre 7 y 13 minutos y que el orgasmo masculino es de menor duración que el femenino.
Los orgasmos tienen algunas cualidades que benefician la salud tanto a nivel físico como psíquico. Los orgasmos, y en general las relaciones sexuales, alivian muchos tipos de dolores funcionando como un analgésico natural: los temidos dolores de cabeza, los menstruales, la artritis…ningún dolor se resiste al sexo. Hacen que mejore el flujo sanguíneo, ya que en el momento del clímax aumenta el ritmo cardíaco y la frecuencia respiratoria, lo que ayuda a oxigenar las células del organismo; levantan el ánimo debido a que durante el orgasmo liberamos hormonas que aumentan la felicidad y disminuyen la depresión; favorecen el sueño y promueven un descanso reparador y la desaparición del insomnio, gracias a la liberación de endorfinas.
Durante la relación sexual y sobre todo en el momento de alcanzar el orgasmo, el cerebro se oxigena, con lo cual también ayuda a que se mantenga sano; disminuye el estrés porque las hormonas que se liberan durante el orgasmo ayudan a reducir los niveles de ansiedad y a liberar la tensión acumulada;otorga bienestar y un brillo saludable en la piel y en el pelo, mejorando nuestro aspecto además de nuestro carácter.
Pero lo más importante es que el orgasmo mejora la salud emocional. Disfrutar de una relación sexual plena se refleja en el estado anímico, por lo que crece nuestra autoestima y nuestra confianza emocional se fortalece.
Esto, si lo piensas bien, haría que viviéramos en un mundo mejor. Si todo el mundo tuviera relaciones sexuales plenas y satisfactorias la gente estaría más feliz y recibiríamos más sonrisas y palabras amables en nuestro día a día, ¿o no?
Pues ya sabéis, a “practicar” el orgasmo querid@s.
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