0
El mundo de la moda siempre ha estado envuelto en alguna polémica relacionada con el tamaño de sus maniquíes. Una de las últimas tiene que ver con la irrupción en la pasarela de la modelo XXL Tess Munster. La joven de 29 años, nacida en un pequeño pueblo de Mississippi, ha fichado por la prestigiosa agencia Milk Management, que ha aprovechado el tirón que tiene la chica en las redes sociales.
Con sus 120 Kilos de peso, 1,65 cm de estatura y una talla 54, Tess es famosa por enarbolar una campaña en internet, con su cuenta de Instagram, donde denuncia la tiranía del mundo de la estética y reivindica la sensualidad de la gordura. Bajo el hashtag #effyourbeautystandards (fuera los cánones de belleza), creado en el año 2013, que ya tiene más de 86.000 seguidores, la modelo publica una serie de fotografías en las que aparece muy sexy luciendo escote, en ropa interior o vistiendo a lo pin-up.
La historia de Tess Munster puede ser la de muchas jóvenes que han tenido que sobrevivir al acoso de las miradas y las críticas por su aspecto físico. Entre sus tatuajes y su maquillaje de pin-up se dejan ver las cicatrices de una infancia marcada por las burlas y el bullying.
En la escuela la atacaban, como ella misma cuenta, por tener curvas, la piel muy blanca y ser bajita. Con 16 años, acudió a un concurso de modelos de tallas grande en Atlanta, era su primer casting para ser modelo “curvy” y la rechazaron por tener demasiado peso. Y es que una modelo con curvas suele tener una talla 42 o 44, mientras que Tess luce una 54.
Pero ella está muy orgullosa de su cuerpo. Es una mujer que en vez de venirse abajo por los insultos y las vejaciones, decidió perseguir su sueño hasta lograrlo. Con 25 años se mudó a Los Ángeles, y allí empezó a trabajar como modelo publicitaria y apareció en programas de televisión. Actualmente, trabaja en ciudades como Londres o Nueva York. En el 2010 comenzó a ascender en su carrera y desde entonces ha ido hilando triunfo tras triunfo.
He leído que antes que ella otras “modelos con curvas” como Robyn Lawley (talla 40) o Candice Huffine (talla 42) calificada como la primera mujer de talla grande en aparecer en el calendario Pirelli, ya habían sido contratadas por la misma agencia que ahora representa a Tess Monster (o Tess Holliday, como se hace llamar actualmente, después de su compromiso con el fotógrafo australiano Nik Holliday con el que ya tiene un hijo).
Lo que me parece increíble es calificar una talla 40 o 42 como talla grande. Eso significa que mucho no ha cambiado el tema de los maniquíes desde la desafortunada conferencia de la supermodelo rusa Natalia Vodianova hace unos años. En su charla sobre moda y alimentación afirmaba que “como todos sabemos, es mejor ser flaca que ser gorda”.
La pregunta es, ¿qué talla debe vestir una flaca y a partir de qué talla se puede considerar que eres gorda? ¿Es lo mismo una modelo curvy que una modelo XXL? Es cierto que ninguno de los extremos es bueno, ni ser demasiado flaca, ni ser demasiado gorda. Quizá Tess Holliday, con su talla 54, no sea un modelo a seguir físicamente hablando, sobre todo porque el exceso de peso conlleva problemas de salud que en muchos casos pueden ser causa de muerte, como también los acarrea la extrema delgadez.
Pero más allá de eso Tess es un ejemplo de lucha, de romper obstáculos, de obstinación y de dejar a un lado los complejos por tener una determinada imagen. Tess, además de modelo y maquilladora, se ha convertido en una de las grandes activistas sociales contra la tiranía de la moda y es la abanderada de la belleza XL. En España tenemos ejemplos también de otras blogueras que reivindican las curvas, como Ana de “El Rincón de Anatxu”, Elisabet de “Vístete que vienen curvas”o las chicas de ‘”Soy Curvy”.
0
