Lucinda Gray es una tarifeña que, por amor, se fue a vivir a Algeciras (Cádiz). Licenciada en Derecho por la Universidad de Cádiz, ejerce como abogada y se ha especializado en la rama de derecho de Disciplina Urbanística.
En 2008 se aventuró a escribir uno de los géneros que más le gustaba leer, y ganando un
concurso de relato corto convocado por la agrupación socialista de Tarifa, con: «Un motivo para luchar».
A partir de entonces, Lucinda no ha parado de inventar historias, y en el año 2010 publicó su primera novela, ‘Lady Ana con amor’ (Ediciones AE), a la que han seguido ‘Secreto: marido’ (2011, autoedición); ‘Dulce arpía’ (2012, Imagenta y 2014, ‘Zafiro’ (Grupo Planeta), con el que ganó el I Certamen literario ciudad de Tarifa, convocado por la editorial Imagen-TA,  ‘Mi señor de Tafalla’ (2012, Ed. Seleeer), ‘Sempre libera’ (2013, Imagenta), ‘Descubriendo el amor’ (2013, Amazon), ‘Inconfesable’ (2014, Imagen-TA), y el relato ‘Juega conmigo’, en la antología de relatos eróticos de diferentes autoras de la Colección LCDE (2014, Amazon).
Además, Lucinda participa con distintas instituciones organizando encuentros que ayudan a promover y fomentar la lectura de la novela romántica, siendo precursora del Encuentro de Novela Romántica de Tarifa, que ya ha celebrado su tercera edición. 

Sonia,¿por qué Lucinda?  Esta pregunta me la han hecho un millar de veces, bueno no tantas, pero sí bastantes. Pues verás, necesitaba un seudónimo que me identificara con lo que me gusta leer, con lo que me gusta escribir, y rebuscando por ahí me acordé de una tía abuela que lleva bastantes años en el asilo porque la pobrecita nunca ha estado bien y… tachán, de Lucita, que es como la llaman cariñosamente, se me ocurrió Lucinda; después solo tuve que buscar un apellido anglosajón que me gustara cuando lo acompañara con el nombre escogido. Y de ahí surgió Lucinda Gray. Claro que el otro motivo es porque quería diferenciar mi carrera literaria de la que ejerzo actualmente. Una cosa muy aburrida.

¿Lo tuyo es la novela romántica o la erótica?  No te voy a engañar, lo mío es la romántica, pero cada vez más en mis novelas hay escenas muy eróticas, aunque sin dejar de ser románticas. Digamos que en mis historias puedes encontrar un 70 % de historia romántica y un 30% de erótica. No obstante tengo que reconocer me gusta mucho la erótica, aunque prefiero que la escriban otras y yo me las lea.

¿Después de la serie Grey te ánimas a hacer algo parecido?  La verdad es que por ahora no entra en mis planes, pero vamos, que nunca puedes decir que “de este agua no beberé”, depende mucho del momento.

Hay que echarle mucha imaginación para describir historias de amor.  Pues la verdad es que imaginación es lo que me sobra, y siempre puedes apropiarte de alguna escena que presencias o te cuentan, o, por qué no, que has vivido. Pero no me preguntes si he descrito alguna real porque no te lo voy a decir (risas).

Reivindicas lo rosa o el caramelo.  Con lo del caramelo me acabas de dejar patidifusa. ¿Eso que es chiquillo? Creo que no estoy en el mundo, me quedé en lo rosa. Reivindico lo rosa y vivo por ello, por algo es uno de los géneros más vendidos.

¿Eres muy romántica en tu vida real?  Una jartá. Me encanta el romanticismo, una palabra, una mirada, un detalle, un abrazo…, son tantas las cosas que nos hacen felices y tienen que ver con el amor que quien diga que no lo es, me refiero a ser romántico, pues creo que no es completamente feliz.

¿Qué es lo primero que te atrae de un hombre?  ¿Esta pregunta tiene truco? Podría quedar bien y decirte que su personalidad, pero mentiría. Lo que me atrajo de mi marido (qué mejor que hablar del hombre que me tiene loca, en más de un aspecto), cuando le conocí, fueron sus ojos y su boca, y que es más alto que yo.

¿Y que es lo que tienes que primero atrae a tus admiradores?  ¿Te refieres al mundo literario, no? Vaya preguntitas que me haces. Creo que en el mundo literario lo que atrae de un escritor es su forma de expresarse, bien, mal o regular, es como los cantantes, no hace falta tener una voz prodigiosa, pero es necesario conectar con el público, en mi caso los lectores. Yo creo que conecto, al menos espero que sea así, si no menudo chasco. 

Si me lo preguntas desde un punto de vista sexual… no tengo ni idea, mi marido dice que soy guapa, pero claro, es mi marido, y el libro de los gustos dicen que sigue en blanco. Dime, ¿crees que soy guapa? Bueno no, mejor ni me contestes no me vaya a llevar un corte.

¿Existe la fidelidad garantizada?  Tajantemente no. ¿Qué, te he parecido brusca? Solo hay fidelidad cuando hay amor, si amas de verdad a una persona jamás, al menos yo lo siento así, tendrás la necesidad de estar con otra.

¿En tus novelas que hay más cuernos o fidelidades?  Es algo curioso, pero en mis historias no suele haber cuernos. Mis protagonistas suelen ser fieles cuando se enamoran, para eso lo escribo yo, y no voy a escribir sobre cosas en las que no creo. Nunca.

Puedo contarte una historia de amor de doscientas páginas o más donde los protagonistas te hagan sentir que los odias, que los amas, que los besarías, que nunca más le dirigirás las palabras, vivir situaciones arriesgadas… un número indefinido de cosas, sin necesidad de ser infieles.

Algo que distingue a tus novelas.  Son novelas romántico- históricas, con situaciones divertidas, sensuales y de gran tensión. Son chispeantes, fiel reflejo de mi personalidad. Con un vocabulario un poco de hoy para que los lectores no se agobien demasiado y puedan entrar de lleno en la trama.

¿Como es este mundo de la novela rosa?  Es maravilloso. Conoces a muchas autoras y autores, lectores, blogueras, editres, libreras, en definitiva gente que sigue la novela romántica en todos sus subgéneros (histórica, paranormal, erótica, contemporanía, comedia…), y cuyo hobby principal es leer este tipo de historias, disfrutarlas, debatirlas. Criticarlas a veces.

¿Hay muchas envidias en la novela rosa?  Pues claro, como en cualquier profesión. Pero la mayoría de las envidias proceden del mundo cultureta, como me gusta llamar a aquellos que piensan que literatura solo es lo que ellos escriben aunque solo los lean su familia y cuatro amigotes para no quedar mal. La novela romántica despierta recelos porque describe las cosas con un lenguaje cercano al lector, con el único objetivo de conseguir que este disfrute y encaje con lo que está leyendo.

¿Cuál es el mejor lugar para un primer encuentro?  Ahí me has pillado, ni idea, el que surja.

¿Te gusta hacer reír o hacer llorar?  Sin duda reír.

¿Te llevas bien con la competencia?  Si te refieres a la competencia dentro de este género, la verdad es que sí. Con una inmensa mayoría.

¿Eres profeta en tu tierra?  Define profeta. Soy conocida por mis vecinos, que ya es algo. ¿Si me siento valorada? Pues no sé, creo que sí, la gente que no me conoce personalmente y a oído hablar de mí me para y me pregunta si soy la escritora. Y me encanta que lo hagan.

¿Ganas dinero con la literatura rosa?  Para vivir de esto no hasta que pegue un pelotazo, para claro que tengo ingresos. Fíjate, mi primera novela que se editó en el año 2.010 aún me está reportando beneficios. Tengo el placer de decirte que he ganado, a veces un poco más otras un poco menos, con todas ellas. La que más me reporta es Lady Ana con amor, seguida de Dulce arpía y Sempre libera. Inconfesable es que hace poco que ha salido, pero no va nada mal.

¿Es un género menor?  ¿Dónde está la vara de medir qué se entiende por género menor? Puede ser que en comparación con grandes literatos de nuestra época lo sea, pero si esta en los primeros puestos de los géneros más vendidos, ¿lo considerarías menor? No me gustaría pensar que a Oscar Wilde, Jane Austen o las hermanas Brontê, ni siquiera a Shakespeare, se les considerase escritores menores. Y sus obras están casi todas, por no decir todas, basadas en el amor.

¿Cuando se pierde la pasión, qué es lo que queda?  Cuando la pierda te contesto.

¿Escribes como de la vida misma o te gusta echar imaginación? Un combinado, adapto a mi imaginación situaciones cotidianas.

¿Preparas algo para el futuro?  La verdad es que… ¡Sí! He acabado hace unos meses un manuscrito que está en revisión editorial, es una comedia erótico romántica. Te diré el título: “Mándame al infierno, pero bésame”, trata de una pija de Sotogrande y un camionero de la Bajadilla, con situaciones muy divertidas. Ambientada en el Campo de Gibraltar en la época actual. Mi primera incursión en la contemporánea y estoy bastante a gusto con el resultado. Espero que en 2.015 pueda ver la luz.

Muchas gracias Sonia.

La sombra del testigo