El Teatro Auditorio Felipe VI de Estepona (Málaga) se vistió con sus mejores galas para celebrar la gala final de Miss World Spain 2015, uno de los eventos de belleza y moda más importantes de España. La ganadora de esta edición es Mireia Lalaguna, Miss World Barcelona.  La joven de 22 años compagina sus estudios de farmacia en la Universidad de Barcelona con su tiempo libre, su afición por el piano y los deportes y el modelaje. Su premio,  representar a España en Miss Mundo 2015 el 19 de diciembre  en  Sanya China.

La joven de ojos azules,con unas medidas de 88-60-90 y  una larga melena rubia, que cumple 23 años este mes de noviembre, consiguió alzarse sobre sus otras 24 compañeras. La manchega Lourdes Rodríguez le dio el relevo. Tras ella quedaron Miss Asturias, Ángela González, que logró la banda de primera finalista y Miss Baleares, Natalia Ferrer, que quedó como segunda finalista. Mireia  confiesa que aún no se hace a la idea.

Una de las preguntas que le hicieron en el concurso Miss España era cómo vendería a su propio país. Su respuesta fue que le gustaría que no se mostraran solamente malas noticias sobre España, que aunque es cierto que estamos viviendo una crisis demasiado dilatada en el tiempo, es un lugar en el que vive gente maravillosa, con estupendos lugares para el turismo y la gastronomía.

Aunque el trabajo para preparar un certamen de este tipo es muy duro (tuvo que preparar una prueba de talento, el vestuario,  numerosos viajes, pasarelas, oratoria…), se siente con más ganas que nunca de seguir trabajando para traerse a España la corona de Miss Mundo.

No se ha hecho ningún retoque a pesar de que  tiene una cara un poco peculiar y unos rasgos muy marcados y confiesa haber sufrido problemas de autoestima cuando estaba en el colegio debido a su estatura y tener los labios gruesos, pero que con el tiempo fue superando. En su opinión,  es necesario romper con los tópicos que rodean los concursos de este tipo, ya que hoy en día no solo buscan belleza, también valoran que tengas estudios, formación y educación.

Pero esta edición de Miss España 2015 ha sido novedosa por otra razón. La presencia por primera de vez de una participante transexual.

Ángela Ponce representó a Cádiz, lugar donde veranea, aunque es sevillana de origen. Realizó su cambio completo de sexo en abril de 2014, tiene  23 años  y unas medidas de infarto, 90-61-90. Compagina su carrera como modelo profesional con el trabajo en el restaurante de sus padres, aunque aspira a acceder a la universidad y estudiar inglés.

Su participación espera que sirviera para la visibilización de este colectivo en nuestra sociedad. Antes del certamen se comprometió a destinar parte de su reinado a la Fundación Daniela, dedicada a la sensibilización del colectivo transexual y transgénero y a contar su historia al mundo. Para esta organización, Ángela sigue el camino, cada vez más normalizado, que han abierto otras misses como Jenna Talackova, Miss Vancouver 2012 en Canadá, o agencias de modelos como The Atlantic, en Nueva York, especializada en modelos trans. No ha logrado entrar entre las diez finalistas del certamen, pero seguro que su compromiso sigue en pie y dando pasos hacia una normalización.

«La sociedad no está educada para la diversidad. Es lo que me ha hecho hacerlo público. Quiero decir: aquí estoy yo y no soy rara, sólo tengo una historia diferente. Una mujer a la que la vida le vino de otra manera pero soy una mujer», ha declarado en una entrevista con Efe.

Ángela, la primera transexual que se presenta al certamen, ha sido compañera de habitación de la ganadora Mireia,  que ha tenido la oportunidad de conocerla muy bien. Dice de ella que es una chica  luchadora y que  puede llegar a ser un referente para todas las personas que están en su situación tanto en el ámbito nacional como en el internacional.

Carmen Blue