Ser mujer sigue siendo difícil en el terreno laboral, no solo por el hecho de cobrar menos ocupando el mismo puesto, o no poder acceder a cargos de relevancia sino también por el hándicap que supone la maternidad. Si hablamos de trabajos como ser científica, esta cuestión se complica todavía más.
Solo el 30% de los investigadores del mundo son mujeres, menos del 20% de los puestos directivos en laboratorios, universidades y centros de investigación en España están ocupados por mujeres y sólo el 18% de los premios se les otorgan a ellas.
Al hablar de ciencia, siempre denunciamos la falta de inversión(al menos en nuestro país) que cada vez es más reducida, pero no podemos pasar por alto que si hablamos de ciencia y mujer las desigualdades con respeto a los hombres son escandalosas. Sigue leyendo