Una de cada tres personas vive en un país con escasez de agua entre moderada y alta, y es posible que para 2030 la escasez afecte a casi la mitad de la población mundial. El cambio climático y las necesidades de la población, requieren un trabajo conjunto para proteger y administrar este recurso frágil y limitado. Es necesario llamar la atención sobre la importancia de los recursos de agua dulce del planeta y crear conciencia sobre la necesidad de un uso sostenible de los mismos.
Tanto el aire como el agua forman parte de nuestras necesidades vitales más imperiosas. Sin ellos no estaríamos en este planeta. Unos 783 millones de personas, un 11% de la población mundial, no tienen acceso a una fuente de agua potable en condiciones. Esa falta de acceso a un agua limpia implica, en muchos casos, horas diarias desperdiciadas en su obtención, restadas de otras necesidades, como la educación. Sigue leyendo